Recientemente autoridades de Estados Unidos y México solicitaron a la Organización Mundial de la Salud una declaración de emergencia de salud pública con carácter internacional debido a un brote de hongos mortales.
Se trata de meningitis fúngica, una infección que podría ser mortal en muchos casos y que ha aparecido en personas, luego de recibir tratamientos cosméticos.
Liposucción, aumento de senos y de glúteos al estilo brasileño, fueron los tratamientos recibidos por muchos de los que hoy están en peligro.
Los citados procedimientos fueron efectuados en dos centros en México que ahora no prestan servicios: la clínica K-3 y el Centro Quirúrgico River Side.
Las cifras alertan de los cientos de personas en esta condición provenientes de varios países, entre los que se encuentran Estados Unidos, Colombia, Canadá y México.
¿Cuál es la situación en Estados Unidos?
Los pacientes procedían de 24 estados estadounidenses, entre ellos Alaska, aunque la mayoría de ellos (178) procedían de Texas, sitio cercano a los establecimientos médicos mexicanos.
Según las estadísticas que monitorean los CDC, 195 personas sometidas a cirugías utilizando anestesia epidural se encuentran ahora en estudio debido a esta situación.
De ellos 14 resultan sospechosos y 11 declarados probables debido a resultados de exámenes y los síntomas que padecen y dos fallecidos.
Uno de los fallecidos era donante de órganos por lo que cinco receptores en el país podrían estar en riesgo ahora mismo, aunque ya han sido contactados y se estudian los casos.
Otros 6 fueron descartados desde la última actualización de datos ofrecidos por los CDC.
Aunque hay un solo caso masculino detectado, la mayoría pertenecen al sexo femenino.
Los síntomas más comunes fueron los dolores de cabeza y una vez que la infección avanzó reportaron otros como vómitos, visión borrosa, dolor en el cuello y fiebre.
Los especialistas de los CDC advirtieron que la enfermedad desarrollada a partir de la infección con los hongos es la meningitis, una infección en el cerebro o en la médula espinal.
Tras el inicio de los síntomas mencionados, puede convertirse en una enfermedad letal. Aun así, los resultados de los brotes en los Estados Unidos no son concluyentes a hongos.
Se solicita a quienes hayan recibido este tipo de tratamiento a partir de enero en las clínicas antes mencionadas que acudan inmediatamente a salas o centros de emergencia, aunque no presenten síntomas.
Los protocolos demandan que, para declarar el estado de emergencia internacional, primero se debe convocar a un comité de la OMS.
En caso de ser verificados y cumplir los requisitos para la orden, luego sería aprobado por el director general de la agencia.
No en todos los casos de notificación como ésta los países son declarados en emergencia sanitaria.
Una portavoz de la agencia no dijo si los Estados Unidos ya la había solicitado alegando confidencialidad con sus estados miembros.
Tampoco respondieron a comentarios sobre el tópico desde el Departamento de Salud y Servicios Humanos del país.
¿Cómo se comporta esta situación en México?
En México también las autoridades sanitarias se encuentran en alerta pues temen que vuelva a ocurrir un brote similar al de principios de 2023, también vinculado a cirugías estéticas en ese país. En ese evento cerca de la mitad de los pacientes infectados perdieron la vida.
Se cree que los pacientes tanto en el caso anterior como en este, fueron atraídos por agentes a las dos instalaciones, ya cerradas ahora, para que les practicaran los procedimientos.
Esos agentes serían una especie de reclutadores que “venden” los tratamientos para lograr mayor afluencia a las clínicas y así beneficiarse a sí mismos con atención médica y quirúrgica.
A diferencia de los de Estados Unidos, los resultados de las pruebas en México sí dieron positivo en muestras de la médula espinal al hongo Fusarium solani, el mismo del anterior episodio.
La alta mortalidad en el grupo de pacientes preocupa a las autoridades mexicanas que, aun así, no han podido comprobar si se relacionan los dos eventos en ese territorio.
Por eso también demandan la pronta asistencia a centros médicos ante los síntomas mencionados o sin ellos, si recibieron cirugías de este tipo en esas clínicas.
Añaden que la anestesia pudo estar contaminada, o cualquiera de los otros medicamentos utilizados en las operaciones.
La falta de medicamentos en ese país y el mercado que se presenta a partir de la situación favorecen los episodios. Estos dos factores unidos a las posibles faltas de control sanitarias en los procedimientos derivan en estos incidentes.
Los hechos son de extrema preocupación por la letalidad de la enfermedad que provoca el hongo, de rápido contagio.
Graduada en Periodismo, especializada en temas de actualidad de Estados Unidos