Las autoridades financieras tomaron medidas tras el segundo mayor colapso de un banco en la historia de los Estados Unidos.
El banco en cuestión, First Republic, fue puesto en control de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) el 1ro de mayo luego de varios meses con serias dificultades económicas.
First Republic es el tercer banco de mediano tamaño que falla en los últimos dos meses, precedido por Silicon Valley Bank (SVB) y Signature Bank, y desde 2008 no se registraba un colapso bancario de su envergadura.
Desde marzo pasado el banco comenzó a experimentar la pérdida de confianza de sus inversores y la preocupación de que no lograra superar el colapso se volvió realidad cuando la FDIC tomó el control y vendió todos sus activos a JPMorgan Chase.
De esa forma, la mayor parte de los cerca de 229.000 millones de dólares en activos y los casi $105.000 millones de depósitos pasan a la mayor institución bancaria del país como forma de controlar una posible desestabilización en el sistema financiero.
De acuerdo con la FDIC, a partir de la adquisición, las 84 sucursales de First Republic pasarán a ser filiales de JP Morgan.
En los ocho estados donde se encuentran ubicadas será posible acceder a los depósitos, pues la entidad reguladora y el banco comprador acordaron compartir las pérdidas que generan los préstamos de banco colapsado.
Los representantes de JPMorgan aseguran que la adquisición será beneficiosa tanto para sus propios ingresos (con un aumento de $500 millones anuales) como para el balance del sistema bancario estadounidense en general.
En tanto, la FDIC recibió pérdidas en sus fondos por 13.000 millones de dólares al tomar el control del banco, elevando a más de $30.000 millones la cantidad empleada para supervisar tanto First Republic como Silicon Valley Bank tras sus colapsos.
¿Por qué colapsó First Republic Bank?
First Republic era un banco reconocido en todo Estados Unidos por la solidez de sus préstamos y la fama de sus clientes.
Sus depósitos, que venían de personas adineradas, superaban los $102.000 millones en 2019 y se contaba entre los bancos de mediano tamaño más importantes del país.
Sin embargo, la mayoría de esos depósitos superaban el límite de 250.000 dólares a partir del cual el dinero deja de estar asegurado.
Luego del colapso del SVB y Signature Bank, los inversores comenzaron a mostrar preocupación sobre las consecuencias de un colapso de First Republic.
De acuerdo con los datos del propio banco, muy pronto los clientes iniciaron la retirada masiva de sus depósitos y generaron una fuga de 100.000 millones de dólares que la institución no fue capaz de suplir.
Poco después las acciones del banco cayeron en un 75%, fueron despedidos unos 7.200 trabajadores y se aplicó un rescate millonario liderado por JP Morgan.Aun así, First Republic no se recuperó del golpe financiero y previo al colapso fue puesto en venta para finalmente ser adquirido por el banco más grande del país.
Valeria Patricia Ríos es una experimentada periodista económica con un talento especial para desentrañar los misterios de la economía global. Con un Doctorado en Economía y una sólida carrera en periodismo, Valeria tiene la capacidad de traducir complejos conceptos económicos en términos que todos pueden entender. Su perspicacia y enfoque pragmático ofrecen una comprensión clara y precisa de los fenómenos económicos más relevantes.