Recientemente el Departamento del Tesoro de Estados Unidos informó la cifra a la que asciende la deuda nacional, número considerado crítico por los especialistas.
La deuda ascendió a más de 33 billones de dólares, según datos ofrecidos por el propio departamento, suma que contrasta con la deuda de solo cuatro décadas atrás cuando el mismo indicador era aproximadamente de 907.000 millones de dólares.
Maya MacGuineas, presidenta del Comité para un Presupuesto Federal Responsable, dijo que el país había llegado a un punto del cual nadie podría sentirse orgulloso.
“Mientras tanto, la deuda pública superó recientemente los 26 billones de dólares. Nos estamos volviendo insensibles ante estas enormes cifras, pero eso no las hace menos peligrosas”
añadió MacGuineas
Este nivel de deuda considerado histórico se anuncia mientras el Congreso trata de evitar un cierre del gobierno cuando concluya el mes de septiembre.
Los republicanos de la Cámara de Representantes ya establecieron un plan a corto plazo conocido como resolución continua, para financiar de manera temporal al gobierno hasta el 31 de octubre.
Una medida ya controversial entre los propios republicanos, que aplicará un recorte del gasto del 8 % a las agencias federales, aunque excluye la financiación para defensa, los asuntos de veteranos y la ayuda ante situaciones de desastre.
Nada parecería ser alentador en este sentido pues la Oficina de Presupuesto del Congreso pronostica que la deuda nacional podría duplicar su tamaño en los próximos treinta años.
Llegando al cierre del 2022, la deuda nacional había crecido hasta cerca del 97 % del PIB y según la ley actual, esa cifra podría dispararse hasta el 181 % cuando concluya el 2053.
Por otro lado, en medio del anuncio que pone al país en números rojos, la Casa Blanca culpa a los republicanos por el aumento de la deuda federal.
Alega que este aumento histórico se debe “a los billones gastados en recortes de impuestos republicanos sesgados hacia los ricos y las grandes corporaciones”.
Michael Kikukawa, subsecretario de prensa de la Casa Blanca dijo a medios de prensa que los republicanos del Congreso querían extender los recortes de impuestos del presidente Trump y derogar las reformas del presidente Biden.
Más allá de quien tenga la razón o la culpa, preocupa la situación y el hecho de que las tasas de interés han aumentado en los últimos 6 meses y esto provocó el encarecimiento del costo del servicio de la deuda nacional.
A medida que aumentaron las tasas de interés, también aumentaron los costos de endeudamiento del gobierno federal sobre su deuda.
Se pronostica que los pagos de intereses sobre la deuda nacional se tripliquen de cerca de 475.000 millones de dólares durante el año fiscal 2022 a 1.4 billones de dólares en el 2032 y a 5.4 billones para 2053.
Valeria Patricia Ríos es una experimentada periodista económica con un talento especial para desentrañar los misterios de la economía global. Con un Doctorado en Economía y una sólida carrera en periodismo, Valeria tiene la capacidad de traducir complejos conceptos económicos en términos que todos pueden entender. Su perspicacia y enfoque pragmático ofrecen una comprensión clara y precisa de los fenómenos económicos más relevantes.