Recientes publicaciones en sitios oficiales anuncian la primera política del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) sobre el uso de las cámaras corporales de los agentes durante el servicio.
Las reglas, se implementarán para avanzar hacia prácticas más efectivas y confiables, según requerimientos de la Orden Ejecutiva del presidente Biden.
El DHS implementará un plan por etapas de las BWC al mismo tiempo que el Congreso avance hacia la obtención de los fondos para asegurar los equipos técnicos que necesitan.
Las agencias y oficinas del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) del país tendrán un período de 180 días para redactar, emitir o actualizar las políticas individuales de BWC.
El Servicio Secreto del país también emitió una política específica de la agencia referida al cumplimiento de la Orden Ejecutiva, pero según fuentes, no se aplicaría a los agentes del Servicio Secreto en Casa Blanca, un de las áreas más importantes del Servicio Secreto.
Las BWC no podrán ser usadas en actividades protegidas por la Primera Enmienda con el solo propósito de registrar a las personas.
Ni para monitoreos a gran escala o vigilancia no autorizada, ni en el rastreo sistémico e indiscriminado de personas, ni para grabar a agentes encubiertos o informantes.
Tampoco podrían ser usadas para registrar individuos o grupos basándose solo en religión, estado civil, origen, raza, afiliación política, sexo, religión, edad, discapacidad, orientación sexual, estado de paternidad, identidad o expresión de género.
Las utilizarán cuando ejecuten órdenes u órdenes de allanamiento e incautación, cuando respondan a arrestos planificados o a llamadas de emergencia.
Estas políticas deberán identificar las técnicas o equipos de investigación especializados o sensibles que pudiesen requerir un tratamiento diferente.
Su implementación dependerá de los recursos y el plan de implementación que proponga la propia agencia.
Incluirán los compromisos de los LEO en la operación, preservación de los datos y cuidado de los equipos, incluso al activarlas o desactivarlas.
Este grupo incluye las de BWC individuales que cumplan o excedan los requisitos asentados en la política del Departamento basadas en proyectos piloto, pruebas e implementaciones por etapas en las agencias que lo han acompañado en dos años previos.
El desarrollo de esta política aunó a expertos de las agencias operativas y de las oficinas centrales del DHS.
Entre ellos estuvieron las Oficinas de Derechos y Libertades Civiles, las de Estrategia, Política y Planes, la de Asuntos Públicos, la de Consejería General y la de Privacidad.
Los interesados en leer textualmente la norma, pueden hacerlo desde aquí.
Experto en redacción y análisis de noticias de última hora, Juan Carlos Herrera ofrece una mirada aguda y equilibrada sobre los acontecimientos mundiales. Con un Master en Periodismo y más de diez años de experiencia en los medios más prestigiosos del país, su habilidad para desglosar los asuntos más complicados en una lectura accesible es insuperable.