Gobernador de Florida Podría Anunciar en Breve su Campaña Presidencial

El gobernador de la Florida podría hacer pública próximamente su campaña electoral rumbo a los comicios de 2024 en los Estados Unidos.

Se trata de Ron DeSantis, quien según diversas fuentes, podría sumarse a la carrera por la Casa Blanca a finales de este mes en curso.

La estrategia, informan, incluye el traslado a una nueva sede en Tallahassee y un comité de acción política (PAC) en línea con el Partido Republicano que planifica su campaña desde Atlanta. 

En próximos días podría reunirse al sur de la Florida con los más importantes recaudadores de fondos para ratificar que es el momento de recolectar los cheques.

Según sus asesores, el desarrollo de la campaña va según lo planificado a pesar de la desconfianza de algunos donantes por las acciones emprendidas recientemente por el gobernador.

También les preocupa su impopularidad tras los ataques de su contrincante Donald Trump, aunque DeSantis dijo que no tomaría alguna decisión sobre el asunto hasta concluir su sesión legislativa. 

Este proceso concluyó a principios de mayo y ya el gobernador finaliza el presupuesto estatal y recorre diversos sitios del estado reafirmando sus victorias en el campo político.

Medios oficiales informan que esta pre- campaña podría batir récords de recaudación.

Los actos locales donde se recaudan los fondos republicanos llegaron a sumar 4.2 millones de dólares en solo dos meses además de las concurridas aglomeraciones.

Llama la atención que esas reuniones incluso se han realizado en zonas que antes fueron dominadas por Trump.

La campaña continúa sin un candidato y aunque Trump lleva ventaja en las encuestas y DeSantis ha sido dañado por la impopularidad, sigue siendo el principal rival del ex presidente.

Nick Larossi, uno de los mediadores de la campaña dijo que la infraestructura estaba lista para el lanzamiento, que están ansiosos por comenzar con todo el proceso.

A pesar de ello los expertos opinan que su posición es mucho más inestable de lo presumido por muchos republicanos. Las dudas se dirigen a si DeSantis podría competir con Trump y llegar hasta el final de la campaña.

Se teme que DeSantis entre a la nominación sin contar con un grupo de asesores cercanos con vasto conocimiento sobre política presidencial.

Bryan Griffin renunció a su reciente puesto de secretario de prensa en la oficina ejecutiva de DeSantis y se presume que se una a la campaña.

Por otra parte, Phil Cox, experimentado republicano en los asuntos podría no participar en la campaña a pesar de haberse unido para supervisarla.

Generra Peck, quien una vez trabajara junto a Cox como director de campaña para la reelección de DeSantis, podría asumir este rol en su lugar.

DeSantis ha sido reconocido por su cautela y por mantener un apretado círculo de operativos evaluando la manera de evitar que los recursos se desvíen hacia los subcontratistas que encuentran trabajo en cada campaña y de los consultores de alto precio.

Fuentes confirmaron que busca no solo personas que piensen igual no solo en materia de política, sino que también se impliquen en el desafío bajo el convencimiento a pesar de lo mucho que habría que sacrificar.

Ya la organización Never Back Down ha dado pasos certeros aún cuando no se oficializa la campaña de DeSantis. 

Desplegó personal en los cuatro primeros estados rojos y sigue en el empeño de alcanzar los 18 primeros anticipándose a lo que califican como una “prolongada batalla contra Trump” 

El viaje inaugural ocurrió el sábado durante un recorrido con el representante Randy Feenstra.

El gobernador de la Florida fue el invitado más importante de este viaje en el autobús “DeSantis for President”. Fue recibido con carteles que decían “DeSantis ’24”.

Como otro desafío, deberá enfrentar las diferencias entre los colaboradores de Tallahasee y su grupo más cercano.

Ya se reunió con varios de los grandes donantes de su partido en su mansión y esbozó, refieren fuentes, lo que sería un discurso a sus partidarios.

Y aunque no es amigo de la llamada prensa generalista, recientemente accedió en sus visitas a periodistas locales y a medios de comunicación del país.

Como estrategia previa a su visita a Iowa, exteriorizó su apoyo a legisladores estatales supuestamente para asegurar más respaldo tras ser superado el pasado mes por Trump según encuestas.

Esquiva los ataques de Trump, aunque definitivamente deberá enfrentarlo tras la postulación. 

En sus declaraciones ha manifestado que, si ponen sobre el tapete los fracasos de la actual administración, los republicanos ganarán.

En el Iowa Sioux Center dijo a sus votantes: “Si no hacemos eso, si nos distraemos, si nos centramos en las elecciones en el pasado o en otras cuestiones secundarias, entonces creo que los demócratas nos van a ganar de nuevo y creo que será muy difícil recuperarse de esa derrota”.

Luego de ese discurso, DeSantis pareció haber superado a Trump al aparecer sin anuncio en una barbacoa en Des Moines, hecho que fue ampliamente divulgado en redes sociales.

A solo minutos de ese sitio estaba concertado un mitin que Trump canceló por amenazas climatológicas.

Esta visita agradó a sus partidarios quienes lo encontraron a la altura del desafío político.

Durante este y otros momentos Desantis hace un paulatino cambio en su imagen pública al presentarse con su esposa, firmar autógrafos y tomarse fotos con las personas que le acompañan.

Todavía no logra sensibilizar a sus votantes en otros aspectos, como su criterio sobre los niños, de los que dice que lo mismo le hacen reír que llorar.

Algunos votantes expresan que debería ser más empático y natural con la gente, acercarse a ellos y conectar, cosa que lo convertiría en mejor político.