Las recientes inundaciones ocurridas en el condado Broward llevaron a que el gobernador del estado de Florida solicitara recientemente ayuda al gobierno federal.
Ron DeSantis solicitó declarar Zona de desastre al condado Broward, esperando poder contribuir así al resarcimiento de los daños causados por los más de 60 cm de agua que cayeron el 12 de abril en varios lugares de la zona.
La lluvia dejó consecuencias como el hecho de que algunas comunidades quedaron hundidas a una profundidad de 90 centímetros bajo el agua. Además, alrededor de unas 1000 viviendas quedaron severamente dañadas.
El aeropuerto del territorio permaneció cerrado por dos días y servicios como las entregas de gasolina también sufrieron afectaciones, lo que trajo como consecuencia un gran atraso y la ocurrencia de enormes colas en los centros de comercialización de combustibles.
Si la solicitud del gobernador floridano obtiene una respuesta positiva del gobierno federal, la declaración de zona de desastre en la región afectada, permitirá préstamos y otros tipos de asistencia a quienes hayan sufrido daños en sus viviendas y en otros patrimonios.
Aunque no se sabe aún cuál será la respuesta del gobierno, muchos esperan un buen entendimiento, pues en situaciones de desastres previas el presidente demócrata y DeSantis han trabajado juntos.
Un ejemplo de ello fue lo ocurrido el pasado 2022 cuando se enfrentaron las devastadoras consecuencias del huracán Ian, que cobró la vida de más de 140 personas y dejó sin hogar a miles de familias.
Un año antes a ese suceso, en el 2021 Biden y DeSantis también trabajaron juntos tras lo ocurrido en el colapso del edificio en Surfside, en el que perdieron la vida un total de 98 personas.
Graduada en Periodismo, especializada en temas de actualidad de Estados Unidos