Un estudio federal indicó que parte del agua potable del país contiene químicos peligrosos que podrían causar problemas de salud de la población.
Según el estudio del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), un 45% del agua potable contiene químicos imperecederos (PFAS).
El reporte del USGS tomó como base muestras de aguas en los grifos de 716 ubicaciones, de ellas 269 pozos privados y 447 de los suministros públicos.
De acuerdo con la agencia, la mayoría de las muestras fueron obtenidas en viviendas, aunque también se incluyen escuelas, centros urbanos con industrias e incluso parques nacionales.
Entre 2016 y 2021 el USGS estudió las muestras, tomadas una vez excepto tres casos, detectando 32 compuestos PFAS en la mitad de ellas.
Aunque gran parte fue detectada mediante la tecnología disponible, los científicos advierten que podrían existir otros químicos contaminantes cuya presencia es indetectable por los equipos actuales.
Los químicos, con concentraciones de hasta 7 partes por billón, se encuentran en el límite de seguridad indicado por la Agencia de Protección Ambiental (EPA).
El USGS señaló que “el estudio muestra más evidencia de que los PFAS son increíblemente ubicuos y las personas que utilizan pozos privados son vulnerables a los daños que causan estos químicos”.
Pese a que las ciudades ubicadas en los Grandes Lagos, las Llanuras y California tuvieron los resultados positivos más importantes, la agencia explica que las personas con pozos privados deberían utilizar filtros de carbón activado o membranas de ósmosis inversa para eliminar el riesgo.
Los químicos imperecederos han acaparado titulares en los últimos años debido a la relación hallada entre estos y el cáncer detectado en animales expuestos a su contaminación.
El estudio, considerado el primero del país, advierte que los PFAS se encuentran básicamente en todos los artículos de consumidor, aunque al ser un análisis académico no propone soluciones.
La EPA anunció que hará uso de los resultados para evaluar sus políticas futuras respecto al agua potable en el país, una de las cuales (relacionada con los límites de 6 PFAS en el agua potable) entrará en vigor a finales de 2023 o inicios de 2024.
Algunos grupos ambientalistas como el Grupo de Trabajo Medioambiental, han solicitado mayor intervención gubernamental.
La administración de Biden no prohíbe a las compañías utilizar los químicos ni eliminarlos en las aguas, pero sí cuenta con regulaciones para evitar que lo hagan frecuentemente.
Experto en redacción y análisis de noticias de última hora, Juan Carlos Herrera ofrece una mirada aguda y equilibrada sobre los acontecimientos mundiales. Con un Master en Periodismo y más de diez años de experiencia en los medios más prestigiosos del país, su habilidad para desglosar los asuntos más complicados en una lectura accesible es insuperable.