Los viñedos y compañías de vino de California enfrentan una situación financiera riesgosa tras el reciente colapso del banco que les acredita.
Al igual que otras industrias como las tecnológicas, las fábricas y negocios de vino californiano tenían como principal institución bancaria para sus cuentas y depósitos al Banco de Silicon Valley (SVB), que colapsó el pasado 10 de marzo.
Aunque en estos momentos la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC) asumió el control del banco y ahora opera los activos de este, las cuentas aseguradas con más de $250 000 recibirán pagos en un momento aún no determinado.
Según fuentes locales, esto pone presión sobre las compañías de vino superiores a ese monto, pues no tienen control sobre cuándo recibirán el dinero de sus cuentas, ni conocen si serán pagos completos o parciales.
Se estima, además, que el 97% de las cuentas en el banco fallido superan el límite de $250 000, por lo que las reparaciones a los clientes podrían tardar semanas o meses.
De acuerdo con los expertos, la situación repercutirá sobre todo en las compañías que comenzaron proyectos costosos antes de la caída del SVB.
Así, las expansiones en viñedos, las remodelaciones en destilerías e incluso los pagos por tarjetas podrían suspenderse si la FDIC congela el dinero en las cuentas.
Aproximadamente el 2% de los préstamos del banco colapsado estaban dirigidos a viñedos y compañías de vino, por lo que el impacto a los salarios de los trabajadores de muchas es difícil de calcular.
El SVB se convirtió desde su fundación en el principal banco de dichas compañías, extendiendo desde 1994 más de $4 billones en préstamos.
Gran parte del capital empleado por los viñedos para la compra de equipos y tierras fue otorgado por el banco, una práctica común en el negocio del vino incluso antes de comenzar a generar ganancias.
La mayor parte de las compañías productoras de vino operan con reservas de efectivo limitadas debido a la naturaleza impredecible del negocio y las cosechas, por lo que sin recuperar los saldos en las cuentas del SVB les sería imposible trabajar a largo plazo.
Por otro lado, las ventas, el marketing y los análisis del mercado podrían experimentar dificultades, advierten los expertos, pues el SVB a través de Rob McMillan y su división de vinos lanzaban el Reporte del Estado de la Industria del Vino anualmente.
Sin el reporte, las compañías más pequeñas pierden un apoyo externo especializado para sus estudios de mercado que podría impactar en su manera de hacer negocios.
Valeria Patricia Ríos es una experimentada periodista económica con un talento especial para desentrañar los misterios de la economía global. Con un Doctorado en Economía y una sólida carrera en periodismo, Valeria tiene la capacidad de traducir complejos conceptos económicos en términos que todos pueden entender. Su perspicacia y enfoque pragmático ofrecen una comprensión clara y precisa de los fenómenos económicos más relevantes.
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Valeria Patricia Ríoshttps://noticiashoy.online/author/valeria-patricia-rios/
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