Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) en los Estados Unidos informaron sobre los peligros de las floraciones de algas tóxicas.
Un reciente reporte de los centros avisó que están enfermando a personas y causando la muerte de animales, con posibilidad de agravar este comportamiento.
También identificadas como HAB, las floraciones de algas tóxicas son producidas por el crecimiento acelerado de las cianobacterias o algas en el agua.
Algunas de estas producen toxinas que podrían enfermar tanto a la especie humana como a los animales por contacto con el agua, aunque también a través de la exposición al aire.
Datos correspondientes al 2021 aportados por los CDC informan sobre 368 floraciones de estas algas en 16 estados del país.
En ese momento los estados más afectados fueron Carolina del Norte, Arizona, Kansas, Illinois, California, Michigan, Utah, Minnesota, Oregón, Pensilvania, Ohio, Tennessee, Wyoming, Wisconsin, Virginia y Washington.
En cada uno de estos estados se detectaron 77 floraciones y entre ellos Utah tuvo el mayor número de personas enfermas.
Washington acumuló la más grande cifra de muerte animal al vincularse más de 2000 muertes de murciélagos por la afección de las algas.
California, por otra parte, se ubicó en el segundo puesto de casos de animales afectados, acumulando 444.
Durante los meses de verano de ese año, el problema se acrecentó al ubicarse el pico de floración de las algas en el mes de agosto.
Unas 248 de las floraciones no tuvieron enfermedades asociadas, pero ya se conocía que 48 eran causa de enfermedades en personas, 79 en animales y 7 de ellas en ambos grupos por igual.
Para ese entonces, los especialistas confirmaron que más del 50 % de las flores estaban cargadas de toxinas.
Los lagos y embalses, fuentes de agua dulce donde se localizó la mayor parte de estas colonias, presentaban un color verde aunque también hubo reportes de enfermedad cuando el agua permanecía clara.
No deben confundirse con la conocida marea roja causada por la bacteria Karenia brevis, pues las algas tóxicas se producen por las cianobacterias o algas verdeazuladas.
Alrededor de 117 personas enfermaron en ese momento luego de entrar en contacto por el aire o el agua con las flores, informaron los centros. De ellos, cerca de la mitad eran niños y adolescentes.
Aunque no hubo ningún fallecido, solo las tres cuartas partes de los enfermos buscaron vías de atención especializada.
Los eventos de enfermedad en personas sucedieron durante el mes de junio y fueron afectados los bañistas en playas y otros en áreas públicas.
Fatiga, fiebre, diarreas, dolores abdominales y de cabeza, erupciones cutáneas, vómitos, irritación de la piel, picazón, tos y dolor de garganta fueron los síntomas más comunes alegados por los enfermos.
Los CDC dijeron que las especies animales sufrieron más daños que los humanos en 2021 por las floraciones tóxicas.
Cerca de 2.715 animales enfermaron por esta causa y el 92 % de ellos murió.
Como se reseñó anteriormente, la especie de los murciélagos se vio muy afectada, pero también otras especies sufrieron como los perros y el ganado.
Para los animales, el peor período de afección fue el mes de agosto, coincidiendo con la etapa de más floración de las algas.
En el caso de las mascotas, los síntomas más comunes que presentan al enfermarse son el letargo, temblores musculares, pérdida de apetito, desequilibrio y vómitos.
También informaron la aparición de otros síntomas, entre los que se encuentra la orina oscura, que afectó sobre todo a la vida silvestre.
Ahora que vuelve a llegar el verano y que la etapa de mayor floración se acerca, los CDC advirtieron que estos eventos podrían intensificarse aún más por causas ambientales.
Las altas temperaturas en el agua y la contaminación de los nutrientes podrían favorecer la proliferación de las cianobacterias.
Según el Instituto de Resiliencia Ambiental de la Universidad de Indiana al aumentar las temperaturas ambientales, también aumentan las de las fuentes de agua dulce.
“Las temperaturas más cálidas del agua en los lagos profundos ralentizan los procesos que agregan oxígeno al agua, creando zonas muertas o áreas con menos oxígeno que no pueden sustentar la vida, estas zonas pueden producir mortalidad de peces a gran escala y floraciones de algas tóxicas”, dijo el instituto.
Añadido a lo anterior alertan sobre la contaminación por nutrientes que provoca la escorrentía y que podría favorecer la producción de algas.
La floración de algas tóxicas tanto en fuentes de agua dulce como marina podría intensificarse y afectar el agua potable, por lo que se necesita tratarla más para el consumo humano.
Experto en redacción y análisis de noticias de última hora, Juan Carlos Herrera ofrece una mirada aguda y equilibrada sobre los acontecimientos mundiales. Con un Master en Periodismo y más de diez años de experiencia en los medios más prestigiosos del país, su habilidad para desglosar los asuntos más complicados en una lectura accesible es insuperable.