La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) informó sobre la confiscación de una bolsa de droga oculta en un curioso lugar en un aeropuerto de Virginia.
De acuerdo con un reporte de la agencia, los agentes sospecharon de la presencia de la droga en la terminal aérea mientras inspeccionaban carga internacional recién llegada al Aeropuerto Internacional de Washington Dulles.
Luego de escuchar sonidos inusuales al levantar un micro estéreo que habría sido enviado a California, los oficiales decidieron pasar el aparato por rayos X.
La inspección demostró que dentro del micro estéreo había sido ocultada una bolsa sellada al vacío con una sustancia blanca y de aspecto cristalino.
Tras haber sido examinado con los instrumentos para tal propósito, los agentes concluyeron que se trataba de hidrocloruro de ketamina.
El paquete tenía como dirección de envío Manchester, en Reino Unido, y dirección de entrega a una localidad cercana a Los Ángeles.
La investigación para detectar a los traficantes continúa y no se han realizado arrestos, agregó Christine Waugh, Directora en funciones del Puerto de Entrada de Washington, D.C.
Waugh también señaló que “las organizaciones criminales transnacionales continúan empleando una gran variedad de tácticas para introducir ilegalmente drogas a los Estados Unidos, pero los oficiales de la CBP son en extremo hábiles para detectarlas”.
En total, la bolsa contenía cerca de dos libras y cuatro onzas de ketamina, una droga que aparece recogida en la Ley de Sustancias Controladas como compuesto no-narcótico de tercera prioridad.
La sustancia será destruida y de haber llegado a las calles, explica el reporte, la bolsa habría tenido un valor de venta sobre los $60.000 dólares.
La oficial también señaló que la agencia suele confiscar al día un promedio de casi 3000 libras de drogas y sustancias peligrosas en los puertos de entrada de todo el país.
La ketamina es un fármaco utilizado en medicina veterinaria para sedar e inmovilizar a los animales antes de ser atendidos.
También suele usarse en humanos como analgésico y más recientemente, como paliativo para ciertos desórdenes mentales.
No obstante, dado su acción tranquilizadora es usada en las calles, donde se conoce como Special K, para inducir alucinaciones y reducir la resistencia en las víctimas de asaltos sexuales al mezclarse con bebidas alcohólicas.
Soy Andy Silva, periodista con sede en Los Ángeles, comprometido con brindar noticias precisas y oportunas sobre la actualidad general en Estados Unidos. Mi formación en UCLA no solo me dotó de habilidades periodísticas esenciales, sino que también me permitió desarrollar una perspectiva global en un mundo interconectado. Estoy siempre en la búsqueda de historias que impacten, informen y conecten a los ciudadanos de nuestra nación.